Desde sus orígenes, el cine aún siendo un género aparte, ha bebido de otras fuentes como eran la novela o el teatro. En los últimos años, a estas inspiraciones, se le han sumado algunas de última generación, como pueden ser los comics, las novelas gráficas (que podemos llamarlas como queramos pero siguen siendo comics) y los videojuegos, todo ello con variopintos resultados. Ha habido grandes éxitos como las sagas de Batman, Spiderman, Superman, y a ese carro se han subido las más actuales Hulk, Iron Man, los 4F, etc.
En fin, de todo ha habido, como en la viña del señor. Yo por mi parte me quedo con el primer Spiderman y el último Hulk. Entre las novelas gráficas, las más sonadas han sido 300 y Sin City, de Frank Miller, que lo cierto es que a este espantapájaros le decepcionó bastante. Creo que muchas veces se empeñan tanto en ser innovadores y en hacer que parezca que estás leyendo un comic, que se olvidan de lo que en realidad es. Una película. Por lo que he visto, la nueva de Frank Miller, The Spirit, tiene pinta de cometer los mismos pecados que su antecesora (aunque me estoy aventurando mucho sin haberla visto).
En cuestión de versiones de videojuegos, seguramente la más importante ha sido la saga de Resident Evil con Mila Jovovich matando zombies a diestro y zurdo, digo siniestro. La que hoy no ocupa es Max Payne, con Mark Whalberg. ¿Qué decir? Lo primero es que para ver esta película hay que mirarla sin prejuicios, es decir, es una peli de acción y basada en un video juego, es difícil que de ahí pueda salir una de las grandes películas de la historia d

el cine. La película, vista de este modo, no está mal. Bastante entretenida, visualmente interesante, y con una trama más o menos detectivesca (no sólo violencia gratuita).
Entre lo malo, sobre todo los estereotipos. El prota es un poli súper duro, con el que nadie quiere trabajar (aunque es el mejor), un personaje bastante plano. Al malo se le reconoce desde antes de aparecer en escena. Hasta un ciego con los ojos vendados y mirando hacia las salidas de emergencia podría adivinar quién es desde el primer instante. Deberían habérselo currado un poquito más, o haber buscado algún giro para intentar sorprender algo al espectador. Por último, la ambientación y la fotografía están muy bien, ciertamente oscuras, con diversos contrastes y bien hechas. No obstante, en algunos detalles de la escenografía, vestuario, y demás, se parecen a otros clásicos de la ciencia ficción, llámense Matrix, Blade, Underworld, Constantine…
En fin, que es una peli para no juzgar, y tan sólo disfrutar con el espectáculo visual que se nos presenta. Al fin y al cabo el cine es en primer lugar eso…entretenimiento.
Felices fiestas a todos de parte del Espantapájaros.